¿No encuentras un trabajo?

Todos buscamos un trabajo que nos paguen por hacer lo que nos gusta, que sea nuestra pasión, nuestra profesión, nuestra misión y nuestra vocación.  ¡Esto es lo ideal y si no lo tenemos… hay que seguirlo buscando!.

La realidad para muchas personas es otra.   Si leemos en los anuncios clasificados nos daremos cuenta que solicitan diferentes requisitos para aplicar a un puesto de trabajo.  La lista de requerimientos es larga y muy raras veces la cumplimos a cabalidad.   Los empleadores te dicen «está sobrecalificado» para el puesto, otras es «indispensable» tal o cual religión, dominar dos o tres idiomas, de preferencia que esté cursando una maestría o doctorado; sin embargo, el salario que ofrecen es de nivel técnico.  Si realmente nos valoramos como profesionales, no aceptaremos esta remuneración.  

Adicional, a nuestra hoja de vida (currículo), es necesario enviar una carta de presentación.  Con esta nota y nuestro historial académico y profesional, nos presentamos a la institución que postulamos.  Recuerda, que la primera impresión, es la que vale y nunca hay dos segundas impresiones.  Antes de enviar tu documentación por correo electrónico o entregarlo físicamente, debes revisarlo o pídele a una persona de confianza que lo lea para evitar que tenga errores o incoherencias en la redacción.  Fíjate en la imagen que coloqué ¿si fueras reclutador o de recursos humanos, le darías la oportunidad de una entrevista?

Lo mismo sucede con una investigación, el simple hecho de redactarlo correctamente, evitar todas las faltas de ortografía, darle el formato adecuado, colocar los elementos que debe tener y ubicarlos en el lugar dónde deben ir, enumeración de páginas, colocar las gráficas debidamente analizadas; definitivamente dan ganas de leerlo o simplemente hacerlo a un lado.

Para la redacción del currículo, debes tener toda la información a mano para colocar bien los datos o fechas de ingreso o egreso, nombre de lugares o personas, direcciones, números telefónicos, títulos obtenidos, cursos recibidos, entre otros.  No puedes redactarlo, sin contar con TODA documentación necesaria e indispensable.  Lo mismo pasa con la investigación.  La INTRODUCCIÓN, se realiza ÚNICAMENTE y ESPECÍFICAMENTE al FINALIZAR tu trabajo de investigación científica y no antes.

¿Por qué no la puedes redactar desde un principio?  porque no tienes TODA la información (documentación) que se servirá de soporte a tu trabajo.  En la misma, vas a describir a grandes rasgos cómo está estructurado tu trabajo (Capítulos), contenido… es invitar al lector a que continúe leyendo tu trabajo y no solo se quede en la primera página.

Recuerda, redactarlo en tercera persona, párrafos concisos y claros.  Los signos de puntuación, son indispensables y por supuesto, la ortografía.

Otro aspecto que debes considerar es que la enumeración es diferente a las otras páginas. Comúnmente se utilizan número romanos en minúscula (depende del reglamento o del profesional que lo solicite).

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